Me llamo Vanesa, soy interiorista. Creo que los pequeños detalles son lo que hace que un espacio cobre relevancia. Los lugares, sin duda, tienen que ser un reflejo de nuestras emociones y me parece apasionante extraer de un trozo de barro belleza y emoción perenne.
Hago vajilla utilitaria y decoración hechas de masas refractarias cocidas a altas temperaturas (entre 1200º – 1300º) con esmalte apto para uso alimentario.